El estado de Brandeburgo, en el este de Alemania, celebró el domingo sus elecciones estatales. El Partido Socialdemócrata (SPD), de centroizquierda, que gobierna Brandeburgo y lidera una débil coalición a nivel federal, se llevó el primer puesto con poco menos del 31% de los votos. Le siguió de cerca el partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD), con alrededor del 29%. Ambos partidos vieron un aumento de un solo dígito en el apoyo desde las elecciones de 2019.

Brandeburgo fue la tercera de las elecciones estatales de este año en Alemania, que se consideran un indicador de las elecciones generales de 2025. En las otras dos, en Sajonia y Turingia a principios de este mes, también hubo buenos resultados para la AfD. Dado que ningún otro partido trabajará con la AfD, que la inteligencia nacional alemana clasifica en parte como un grupo extremista de extrema derecha, puede resultar difícil formar coaliciones de gobierno estables en estos estados.

El éxito de los partidos extremistas y la debilidad de los tradicionales han llevado a la clase política alemana a un ajuste de cuentas. Un aspecto que hay que tener en cuenta es cómo la AfD ha utilizado eficazmente las redes sociales para captar votantes.

Richard Kuchta es analista digital en el Instituto para el Diálogo Estratégico, un grupo de investigación alemán especializado en desinformación y extremismo. Habló con El Parlamento sobre el papel que desempeñan las redes sociales en la configuración de las narrativas políticas.

La siguiente entrevista ha sido editada para mayor claridad y extensión.

¿Qué importancia tuvieron las redes sociales a la hora de influir en los resultados de las elecciones estatales de este año?

No se trata tanto de ganar nuevos votantes, sino de mantener el apoyo existente. Las redes sociales desempeñaron un papel, pero no necesariamente radicalizaron a nuevos votantes durante la campaña. Muchos votantes que apoyaron a la AfD en elecciones anteriores se mantuvieron leales. La creciente fuerza del partido en la región crea un efecto de bola de nieve, lo que facilita la atracción de nuevos votantes. Las redes sociales fueron importantes para mantener comprometida a su base existente, pero no son la única explicación de su éxito. Su lenguaje se ha vuelto más extremo, y las autoridades federales incluso han tachado a la AfD de extremista en Turingia y Sajonia. El tema de la migración fue muy utilizado en sus mensajes, tanto en línea como fuera de línea.

¿Qué plataformas de redes sociales desempeñaron el papel más importante en la formación de la opinión pública durante estas elecciones?

Facebook fue la plataforma más utilizada por los candidatos de AfD en Sajonia y Turingia. También se utilizó X, pero Telegram, que es más popular a nivel federal, no fue tan dominante en estas elecciones estatales. La mayor parte de la actividad se centró en Facebook y X.

¿Hasta qué punto podemos establecer una relación causal entre la actividad de las redes sociales y los resultados electorales?

Es difícil decirlo con certeza sin más datos. Las redes sociales fueron una parte clave de las campañas tanto en línea como fuera de línea. Para llegar a la mayor cantidad posible de votantes, los partidos tuvieron que mantenerse activos en ambos frentes. Pero es importante no exagerar el impacto de las redes sociales por sí solas.

¿Qué papel jugó la desinformación o información errónea en la configuración de las percepciones de los votantes durante las campañas?

La desinformación se está volviendo más matizada y compleja; ya no es tan clara como antes. Hubo casos de tergiversación de hechos durante la campaña, especialmente en cuestiones como la migración y la guerra en Ucrania. La AfD mencionó estos temas con frecuencia, a menudo presionando por la paz o el fin del conflicto. Independientemente de si se utilizó o no activamente la desinformación, el hecho de alimentar constantemente estos temas fue suficiente para influir en la percepción de los votantes.

¿Cree que la estrategia de redes sociales de la AfD estaba dirigida a grupos demográficos específicos, como los votantes más jóvenes?

La AfD tiene una fuerte presencia en Telegram y TikTok, y se conecta con los votantes más jóvenes. En estas elecciones, una parte considerable de los votantes más jóvenes, especialmente en comparación con las generaciones mayores, apoyaron a la AfD. Sin embargo, a nivel regional, los candidatos de la AfD utilizaron principalmente plataformas tradicionales como Facebook y X, que no son tan populares entre los jóvenes. La estrategia parece más destacada a nivel federal, siendo TikTok una de las plataformas que utilizan para dirigirse a los grupos demográficos más jóvenes.

La AfD ha utilizado un lenguaje más duro en sus mensajes. A menudo traspasa los límites de lo que se considera un lenguaje aceptable, caminando sobre una delgada línea para evitar violar las reglas de la plataforma. Su enfoque resuena más entre los votantes desilusionados y aquellos que ya se inclinan por sus puntos de vista.

¿Cómo influyeron las redes sociales en la percepción del público sobre cuestiones clave durante estas elecciones estatales, como la inmigración o la política económica?

Las redes sociales han desempeñado un papel fundamental a la hora de difundir el mensaje de la AfD, especialmente en materia de inmigración. No disponemos de datos que permitan saber exactamente en qué medida han tenido un impacto, pero lo que sí podemos observar en general es que el sentimiento público sobre la inmigración ha sido cada vez más negativo en Alemania, algo que la AfD ha aprovechado. Han podido alimentar el miedo en torno a los inmigrantes, especialmente en relación con el aumento del número de incidentes y ataques en Alemania, lo que les ha permitido obtener más apoyo político.

¿Qué tan bien puede usted evaluar el papel de las redes sociales en el discurso político?

El problema principal es la falta de acceso a los datos. Solo pudimos obtener los datos de Facebook hasta mediados de agosto porque Meta cerró la herramienta Crowdtangle en agosto, lo que dificultó a los investigadores rastrear las tendencias en las redes sociales. Sin estos datos, es difícil analizar estas diferencias con precisión.

¿Qué lecciones debería sacar el establishment político alemán de estas elecciones en términos de participación en los medios digitales y sociales?

Lo que realmente importa es que el lenguaje extremo y el extremismo no se generalicen aún más, porque entonces se vuelven mucho más peligrosos y, de repente, el lenguaje extremo se normalizará y será utilizado por todos los actores políticos y en la sociedad en general. Y términos que antes no se utilizaban porque eran problemáticos, de repente se utilizarán con normalidad en la conversación cotidiana. Se debe evitar fomentar y contribuir a la generalización del lenguaje extremo.

¿Qué más hay que tener en cuenta a la hora de evaluar estos resultados electorales?

Estas elecciones se celebraron en el contexto de dos grandes conflictos: la guerra entre Rusia y Ucrania y el conflicto entre Israel y Hamás. Si bien la guerra en Ucrania fue un tema importante, especialmente en el este de Alemania, el conflicto entre Israel y Hamás no fue tan destacado en las campañas. La AfD se centró más en la migración y la guerra en Ucrania, evitando un debate significativo sobre Oriente Medio. Probablemente se trató de una decisión estratégica, ya que la migración y Ucrania son cuestiones de mayor resonancia entre sus bases en estas regiones.