La policía de las Maldivas está investigando un presunto intento de derrocar al presidente Mohamed Muizzu fomentando la ira por los crecientes problemas financieros del archipiélago del océano Índico.
La semana pasada, el principal banco comercial del exclusivo destino turístico redujo drásticamente el gasto en divisas permitido a los maldivos, lo que desató un enojo generalizado.
Muizzu ha criticado la medida como un “intento ilegal” de derrocar a su gobierno, haciéndolo impopular y alentando las protestas callejeras.
“Se ha abierto una investigación sobre el supuesto intento de golpe de Estado”, dijo la policía en un comunicado emitido el lunes por la noche.
No ha habido manifestaciones en la capital, Malé, pero en internet han surgido duras críticas contra el gobierno.
“Se han utilizado cientos de cuentas ‘bot’ en las redes sociales para alentar a la gente a salir a las calles para derrocar al gobierno e incitar al malestar público”, dijo la policía.
El banco dijo que los cambios, que luego fueron anulados, se produjeron “en respuesta al creciente uso del gasto en moneda extranjera en tarjetas y la venta estática de moneda extranjera al Banco”.
La agencia internacional de calificación crediticia Fitch rebajó la calificación de Maldivas en junio y advirtió que el país podría encaminarse hacia un default soberano, después de que sus reservas de moneda extranjera cayeran a 492 millones de dólares en mayo.
La rebaja se produjo semanas después de que el FMI advirtiera a las Maldivas sobre una inminente “dificultad de deuda”, ya que el país pequeño pero estratégicamente ubicado planea tomar más préstamos de su principal acreedor, China.
Pivote hacia China
Los datos oficiales mostraron que la deuda externa de Maldivas alcanzó los 4.038 millones de dólares el año pasado, alrededor del 118 por ciento del producto interno bruto, un aumento de casi 250 millones de dólares respecto de 2022.
Fitch había señalado que las obligaciones de servicio de la deuda del gobierno, que ascienden a 409 millones de dólares este año, aumentarían el estrés.
La crisis se intensificó durante el fin de semana, cuando el Banco de Maldivas Limited (BML) suspendió las transacciones con tarjetas de débito y permitió un gasto máximo mensual con tarjeta de crédito de $100 para transacciones en línea.
Los maldivos utilizan sus tarjetas para pagar matrículas y tratamientos médicos en el extranjero, además de realizar compras en línea.
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Los partidos políticos han pedido al Gobierno que grave los hoteles en moneda extranjera.
Desde que asumió el cargo el año pasado, Muizzu ha reorientado su nación desde la tradicionalmente benefactora India hacia China.
En junio de 2023, el Banco de Exportación e Importación de China poseía el 25,2 por ciento de la deuda externa de Maldivas y era el mayor prestamista individual del país, según mostraron las cifras del Ministerio de Finanzas de Malé.
