El exjefe de la federación española de fútbol, Luis Rubiales, negó las acusaciones de agresión sexual y coerción presentadas por la jugadora de la selección nacional y ganadora de la Copa del Mundo Jenni Hermoso, durante una audiencia judicial preliminar el viernes.
Las acusaciones de Hermoso se producen en el contexto del controvertido beso de Rubiales en los labios de la jugadora durante las celebraciones posteriores a la final de la Copa Mundial Femenina el mes pasado.
El juez de instrucción impuso a Rubiales una orden de alejamiento que le impide contactar o acercarse a menos de 200 metros de Hermoso. Los fiscales estatales habían solicitado una prohibición de hasta 500 metros.
¿Qué más pasó durante la audiencia?
Los fiscales también pidieron que Rubiales sea sometido a un control judicial cada 15 días para garantizar que no huya del país. El juez rechazó esa solicitud.
La audiencia, que duró una hora, tuvo lugar en la Audiencia Nacional y estuvo cerrada al público. Ni Rubiales ni su abogada defensora, Olga Tubau, hicieron declaraciones a los medios fuera del juzgado.
El juez tendría que decidir si envía a juicio al ex jefe de la federación.
Si es declarado culpable de un cargo de agresión sexual, Rubiales podría ser sentenciado a prisión por un período de entre uno y cuatro años.
un beso no deseado
Rubiales sostuvo la cabeza de Hermoso con ambas manos y la besó en los labios durante la ceremonia de entrega de medallas que siguió a la victoria de España por 1-0 sobre Inglaterra en la final de la Copa Mundial Femenina en Australia el 20 de agosto.
Hermoso, que la semana pasada presentó una denuncia contra él, afirmó que el beso la había dejado sintiéndose “vulnerable y como víctima de una agresión”, y en un comunicado en las redes sociales lo calificó como “un acto impulsivo, machista, fuera de lugar y con ningún tipo de consentimiento por mi parte.”
Rubiales rechazó las acusaciones de agresión sexual e insistió en que el beso fue “espontáneo, mutuo, eufórico y consensual”. Sin embargo, la semana pasada anunció que renunciaría a su cargo de presidente de la Federación Española de Fútbol bajo una presión cada vez mayor.
El organismo rector del fútbol mundial, la FIFA, suspendió de su cargo a Rubiales, de 46 años, el 27 de agosto durante 90 días, en espera de una investigación.
Las futbolistas mantienen la huelga
Las jugadoras de la selección española de fútbol femenino mantuvieron una huelga anunciada el mes pasado como reacción al beso de Rubiales. Los jugadores dijeron el viernes que seguirán rechazando las convocatorias de selecciones nacionales hasta que se realicen más cambios en la federación.
El anuncio se produjo cuando la recién nombrada entrenadora Montse Tome tenía previsto anunciar el viernes su equipo para los dos próximos partidos contra Suecia y Suiza a finales de este mes para la Liga de Naciones.
Los jugadores emitirán un comunicado más tarde el viernes describiendo los cambios que aún esperan ver antes de poder regresar, informaron los medios españoles.
Unos 81 jugadores firmaron el mes pasado una carta anunciando que boicotearían a la selección nacional hasta que se hicieran cambios significativos al frente de la federación. Entre ellos estaban los 23 campeones del mundo.
rmt/sms (AFP, AP, Reuters)
