El huracán Hilary se dirigió a la Baja California de México el sábado cuando el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de EE. UU. pronosticó “inundaciones catastróficas y potencialmente mortales” para la península y el suroeste de los Estados Unidos.
Temprano el sábado, la tormenta tenía su centro a unos 375 kilómetros (235 millas) al oeste del extremo sur de la península de Baja California.
Se movía de norte a noroeste a 16 millas por hora (26 kilómetros por hora) y se esperaba que girara más hacia el norte y ganara velocidad.
Después de ganar fuerza rápidamente el viernes temprano, Hilary disminuyó un poco la velocidad, pero siguió siendo un gran huracán de categoría 3 con vientos máximos sostenidos de 125 millas por hora (205 kilómetros por hora), frente a 145 millas por hora.
Se espera que el huracán se debilite aún más a medida que avanza hacia el sur de California el viernes, donde sería la primera tormenta tropical de la región en 84 años.
México cancela actividades no esenciales
El estado mexicano de Baja California canceló actividades públicas no esenciales, hasta el lunes.
Los residentes y trabajadores del complejo turístico de Cabo San Lucas colocaron tablas protectoras y miles de sacos de arena cuando las grandes olas comenzaron a romper en la costa.
Se vio personal militar patrullando la playa de la ciudad, un destino popular tanto para turistas mexicanos como extranjeros.
Las autoridades de Tijuana comenzaron a instalar refugios temporales y limpiar los trenes de aguas pluviales a medida que se acercaba el huracán. La ciudad montañosa es particularmente propensa a los deslizamientos de tierra.
“Somos una ciudad vulnerable por estar en una de las fronteras más visitadas del mundo y por nuestro paisaje”, dijo la alcaldesa Montserrat Caballero Ramírez.
En el estado vecino de Baja California Sur, las autoridades pospusieron un gran partido de béisbol y cerraron puertos.
“Sin alarmismos, todos debemos tomar precauciones y abastecernos de agua y artículos de primera necesidad en el hogar, sin recurrir a compras de pánico”, dijo el gobernador del estado, Víctor Manuel Castro Cosío.
Sur de California en alerta máxima
En el sur del estado de California, EE. UU., se cerraron algunos parques nacionales y se reubicaron los juegos de las Grandes Ligas de Béisbol en previsión de un clima extremo, como no se había visto en décadas.
Varias ciudades distribuyeron sacos de arena para proteger las propiedades contra las inundaciones.
“Se espera que Hilary se debilite a tormenta tropical el domingo por la noche antes de llegar al sur de California”, dijo el NHC con sede en Miami.
Los remanentes de los huracanes de México a veces afectan a California, pero es raro que los ciclones azoten el estado con intensidad de tormenta tropical.
También se espera que fuertes lluvias azoten los estados vecinos de Arizona y Nevada.
El subdirector del NHS, Jamie Rhome, advirtió sobre los riesgos de inundaciones en las principales ciudades, incluidas San Diego, Los Ángeles, Palm Springs y Las Vegas.
“Si tiene planes para el fin de semana, probablemente sea hora de comenzar a modificar esos planes”, dijo.
mm, zc/ancho (AP, AFP, Reuters)
