Bangladesh ha tomado medidas decisivas contra el partido Jamaat-e-Islami, prohibiéndolo por completo. La medida se produce en respuesta a las violentas protestas que estallaron a causa de las cuotas de empleo del Gobierno, que se saldaron con la trágica pérdida de vidas de al menos 150 personas.
La coalición gobernante liderada por la Liga Awami, durante una reunión el martes (30 de julio) presidida por la Primera Ministra Sheikh Hasina, culpó a Jamaat-e-Islami de explotar las protestas e instigar la violencia.
El gobierno tuvo que desplegar el ejército para controlar los disturbios, que provocaron varias víctimas y daños a importantes instalaciones gubernamentales.
La Primera Ministra Hasina decidió prohibir Jamaat-Shibir para abordar lo que considera amenazas extremistas a la seguridad nacional.
Cabe destacar que la decisión sigue a un fallo anterior del Tribunal Superior en 2018 que canceló el registro de Jamaat, descalificándolo para participar en las elecciones.
Esta medida también está en consonancia con fallos y juicios anteriores contra los líderes de Jamaat por crímenes cometidos durante la guerra de independencia de Bangladesh en 1971.
