Francia ha emitido una orden de arresto internacional contra el presidente sirio Bashar Assad; su hermano Mahel, jefe de facto de una unidad militar de élite siria; y otros dos funcionarios sirios por ataques químicos en 2013, dijeron el miércoles una fuente judicial y los demandantes en el caso.
Es la primera orden de arresto internacional emitida contra el presidente de Siria, cuyas fuerzas respondieron a las protestas que comenzaron en 2011 con una brutal represión que, según los expertos de la ONU, equivale a crímenes de guerra.
Las órdenes, que se relacionan con cargos de complicidad en crímenes contra la humanidad y complicidad en crímenes de guerra, surgen tras una investigación criminal sobre ataques químicos en la ciudad de Douma y el área de Ghouta Oriental, cerca de Damasco, en agosto de 2013, que mataron a más de 1.000 personas.
La unidad del tribunal de París encargada de crímenes contra la humanidad investiga los ataques químicos desde 2021. Francia reclama jurisdicción mundial sobre presuntos crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
La investigación siguió a una denuncia legal presentada por la ONG Centro Sirio para los Medios y la Libertad de Expresión (SCM), la asociación de abogados Open Society Justice Initiative (OSJI) y el Archivo Sirio, un organismo que documenta violaciones de derechos humanos en Siria.
Ataques químicos en Siria
En agosto de 2013, activistas de la oposición siria publicaron vídeos de aficionados en YouTube que pretendían mostrar los efectos del ataque químico en Guta Oriental, incluidas imágenes de decenas de cadáveres, muchos de ellos niños, tirados en el suelo.
Las escenas provocaron indignación y condena mundial. Un informe de las Naciones Unidas dijo más tarde que había pruebas claras de que se había utilizado gas sarín.
Siria acordó en 2013 unirse al organismo de control mundial, la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), y renunciar a todas sus armas químicas.
Desde entonces, la OPAQ ha culpado a Damasco de una serie de ataques químicos durante la guerra civil.
El gobierno sirio ha negado las acusaciones, que también han provocado acciones legales en Alemania y otros países europeos.
dh/lo (AFP, Reuters)