El presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo, criticó el viernes un intento de la fiscalía de invalidar su victoria en la segunda vuelta de las elecciones de agosto, calificando las acusaciones de irregularidades como “absurdas, ridículas y perversas”.
El tribunal electoral del país centroamericano también calificó los resultados de “inmutables”.
Las investigaciones iniciadas contra Arévalo por la Fiscalía General son ampliamente vistas en Guatemala como una reacción alarmada de la élite política del país a sus promesas de combatir la corrupción en el país.
¿Cuáles son las acusaciones que hacen los fiscales?
La fiscal general Consuelo Porras y el fiscal superior Rafael Curruchiche han estado encabezando esfuerzos para socavar la victoria de Arévalo, entre otras cosas alegando irregularidades en el registro de su partido de centro izquierda Movimiento Semilla hace varios años.
Porras, Curruchiche y el juez Fredy Orellana, que quería que se suspendiera el partido, están todos en una lista estadounidense de “actores corruptos” y sus acciones han provocado manifestaciones masivas de guatemaltecos pidiendo su renuncia.
El viernes, la fiscal Leonor Morales dijo que la elección de Arévalo, su vicepresidente y los parlamentarios era “nula de pleno derecho”, y que las investigaciones supuestamente mostraban que hubo “anomalías” en el conteo de votos en la primera vuelta de junio.
¿Qué han dicho Arévalo y el tribunal electoral?
En una conferencia de prensa el viernes, Arévalo dijo: “Este intento de golpe es real y nos ha llevado a un momento crucial”.
“Los golpistas están tratando de destruir el régimen democrático y poner fin al derecho básico de los guatemaltecos a vivir en libertad”, añadió.
Llamó a los guatemaltecos a “defender enérgicamente” al país del intento de impedir su toma de posesión el 14 de enero como estaba previsto.
La presidenta del máximo tribunal electoral de Guatemala, Blanca Alfaro, dijo que no se repetirían las elecciones y calificó los resultados de la segunda vuelta de agosto como “inalterables”.
Dijo que impedir que Arévalo asumiera el cargo después de haber sido debidamente elegido sería “una ruptura en el orden constitucional”.
Apoyo desde el extranjero
Estados Unidos, la Unión Europea, la ONU y la Organización de Estados Americanos (OEA) han expresado preocupación por los acontecimientos en Guatemala.
La secretaría de la OEA dijo en un comunicado que “condena el intento de golpe de Estado por parte del Ministerio Público de Guatemala”.
“El intento de anular las elecciones generales de este año constituye la peor forma de ruptura democrática y la consolidación de un fraude político contra la voluntad del pueblo”, añade el comunicado.
La OEA llamó al presidente saliente Alejandro Giammattei, a las cortes constitucional y suprema y al Congreso “a defender las instituciones y el orden constitucional del país tomando acciones contra los autores de este ataque con el fin de preservar la democracia en Guatemala”.
El gobierno de Giammattei emitió un comunicado diciendo que la transición a Arévalo era inevitable, pero no llegó a criticar directamente a los fiscales.
Más de la mitad de los guatemaltecos viven en la pobreza, según datos del Banco Mundial, y miles de personas abandonan su país cada año en busca de una vida mejor, a menudo en Estados Unidos. Muchos culpan a la corrupción por la situación económica del país.
tj/ab (Reuters, AFP)