La UE necesita hacer sus deberes: la ampliación exige reformas en todas partes

La UE necesita hacer sus deberes: la ampliación exige reformas en todas partes

Ampliar el bloque requiere una preparación cuidadosa por parte de la UE, tanto institucional como financieramente.
Vista de Mostar y el río Neretva. Bosnia y Herzegovina es uno de los cinco países candidatos de los Balcanes Occidentales.

Para que sea viable y políticamente exitosa, la ampliación de la Unión Europea debe prepararse mediante reformas importantes tanto en los países candidatos como a nivel europeo. Para mí, en mi calidad de coponente, este es el principal mensaje político del informe. Profundizar la integración de la UE con vistas a una futura ampliaciónaprobado por el Parlamento Europeo durante su segunda sesión plenaria de febrero en Estrasburgo.

El hecho de que un informe sobre un tema tan candente obtuviera un amplio apoyo (305 votos a favor, 157 en contra y 71 abstenciones) demuestra que el Parlamento Europeo está dispuesto a tomar en serio los numerosos desafíos que conlleva la ampliación de la UE.

No hace mucho, cuando se hablaba de la necesidad de preparar la próxima ampliación, se pensaba principalmente en reformas en los países candidatos para cumplir los criterios de Copenhague. Y, de hecho, esas reformas siguen siendo indispensables, incluso en temas cruciales como los derechos humanos, el estado de derecho y el funcionamiento de la democracia. En consecuencia, el informe del PE deja claro que cada candidatura debe evaluarse por sus propios méritos, sin procedimientos acelerados ni calendarios predefinidos.

Lo nuevo en el debate político sobre la ampliación es que la gente es cada vez más consciente del hecho de que también necesitamos reformas institucionales y financieras previas a la ampliación a nivel europeo. Ahí es donde el informe del PE constituye una contribución importante.

Como ejercicio conjunto de la Comisión de Asuntos Constitucionales y la Comisión de Asuntos Exteriores, este informe transmite mensajes políticos contundentes sobre las diversas dimensiones del proceso de ampliación. Reconoce que la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania ha reforzado la importancia geoestratégica de ampliar la UE, pero también señala que una Europa ampliada no puede funcionar adecuadamente bajo las viejas reglas diseñadas para los 27.

Es importante recordar que tenemos no menos de nueve países candidatos y Kosovo está dispuesto a sumarse a esa lista. Las negociaciones de adhesión están en curso con la mayoría de ellos y, en algunos casos, llevan muchos años. Persiste una mezcla de expectativas y decepción, en particular en los Balcanes occidentales. Obviamente, esto no puede durar para siempre.

La UE necesita hacer sus deberes en paralelo con las negociaciones de adhesión, y debería comenzar más temprano que tarde. Por supuesto, el grado de los cambios necesarios a nivel europeo depende en gran medida de la escala del escenario de ampliación, en términos del número de países involucrados y su tamaño. Es posible que acabemos con varios procedimientos de ampliación, en lugar de sólo uno o dos. En cualquier caso, el informe del PE propone claramente una serie de reformas previas a la ampliación en la arquitectura institucional y presupuestaria de la UE.

Una Europa ampliada no puede funcionar adecuadamente según las antiguas reglas diseñadas para los 27.

En el lado institucional, necesitamos simplificar nuestros procedimientos de toma de decisiones, con menos unanimidad y decisiones por mayoría más cualificada para reducir el riesgo de bloqueos. También necesitamos revisar la composición de la Comisión Europea y del Parlamento, sin descartar un aumento razonable del tamaño del PE para que todos los países estén suficientemente representados en la “casa de la democracia europea”. La integración diferenciada también debería ser parte de la solución, aprovechando plenamente la flexibilidad que ya permite el Tratado de Lisboa, garantizando al mismo tiempo una amplia zona de terreno común europeo.

En el aspecto financiero, es obvio que la ampliación representa un desafío sustancial para la UE, en particular en lo que respecta a su impacto en las políticas de cohesión y agricultura. Esto requiere un mayor presupuesto de la UE y debe abordarse antes de que se produzca cualquier ampliación.

Tras el Brexit, algunos anticiparon un efecto dominó que conduciría a la implosión de la UE. La historia decidió lo contrario. Hoy en día, ningún país quiere salir y muchos quieren unirse, una señal clara de la vitalidad de la UE y de la esperanza que representa para muchos. Ésta es otra razón de peso para abordar en serio la ampliación, asegurándonos de antemano de que estamos preparados para absorber nuevos miembros. Sólo así la ampliación podrá ser una historia de éxito para todos.