El Consejo de la Federación de Rusia, la cámara alta del parlamento, votó el jueves por unanimidad para aprobar un decreto que fija el día de las próximas elecciones presidenciales del país para el 17 de marzo.
El actual presidente Vladimir Putin, de 71 años, aún no ha anunciado su intención de postularse nuevamente, pero se espera que lo haga pronto, después de haber promovido cambios constitucionales que lo hacen elegible para buscar dos mandatos más de seis años después de que expire el actual. en 2024.
Victoria casi segura de Putin
Si Putin gana y completa otro mandato, se convertirá en el líder de Rusia con más años de servicio desde la emperatriz Catalina la Grande en el siglo XVIII, rompiendo el récord anterior del dictador Josef Stalin.
Ha estado en el poder como presidente o primer ministro desde 2000.
El estricto control de Putin sobre el sistema político en Rusia significa que su victoria está prácticamente asegurada, y quienes podrían oponerse efectivamente a él están en la cárcel o viviendo en el extranjero.
Goza de índices de aprobación constantemente altos en las encuestas independientes a pesar de haber sumido a su país en una costosa y prolongada guerra con Ucrania y de haber sufrido lo que parece haber sido una rebelión fallida por parte del líder mercenario Yevgeny Prigozhin.
Escasa oposición
Hasta ahora, dos personas han anunciado planes de postularse a la presidencia contra Putin.
Uno de ellos es el ex legislador Boris Nadezhdin, que ocupa un puesto en un consejo municipal de la región de Moscú; la otra es Yekaterina Duntsova, periodista y abogada de la región de Tver.
Sin embargo, a menos que sean nominados por uno de los cinco partidos representados en la Duma estatal, tendrán que reunir decenas de miles de firmas en varias regiones para siquiera llegar a las urnas.
Es probable que los votantes puedan votar en línea, así como mediante boletas tradicionales en papel, en unas 30 regiones rusas. Las elecciones podrían extenderse a tres días, una práctica que se adoptó durante la pandemia y fue ampliamente criticada por los observadores electorales independientes.
tj/nm (AFP, AP)
