Magen Inon es hijo de un productor de hortalizas. Preparar ensaladas para sus hijos en su cocina de Londres le recuerda a su hogar. Hogar, esa era una casa de madera en Israel, en un pequeño pueblo cerca de la franja de Gaza. Sus padres estaban dentro cuando fue atacado el 7 de octubre y quemado por completo.
(Magen Inon, profesora)
“Lo que fue asesinado aquí va más allá de mis padres. Siento como si fuera mi infancia la que fue asesinada ese día”.
Magen Inon, su esposa e hijos pasaron muchos veranos felices con sus padres allí, donde él creció.
(Magen Inon)
“Ya casi no queda nada. A mis padres les encantaba trabajar en el jardín”.
Inmediatamente después del asesinato de sus padres, él y sus hermanos hicieron un pacto: no ceder ante el odio.
Por eso está aquí, en una vigilia en el centro de Londres: “Juntos por la Humanidad”, se llama. Judíos, musulmanes, cristianos y no creyentes. Londinenses comunes y corrientes, uno al lado del otro.
(Magen Inon)
“Para avanzar, debemos reconocer el sufrimiento y la pérdida de vidas inocentes de ambas partes”.
Los activistas aquí dicen que enfrentan presiones para tomar partido. Y, de hecho, podrían tener opiniones políticas diferentes. Pero todos se niegan a ceder a la polarización.
(Magen Inon)
“Suena ingenuo en este momento, pero avanzar hacia algún tipo de situación más pacífica tiene sentido. Todo lo demás carece de sentido”.
(Mira Awad, activista por la paz palestina)
“Si seguimos con el ciclo, volveremos al mismo resultado, que es destrucción y muerte. No hay otra alternativa que recordarle a la gente que tenemos que terminar con esto, tenemos que compartir el espacio”.
Las velas aquí están encendidas por todas las víctimas, no sólo por un lado.
Magen Inon ha impresionado al clérigo de mayor rango de la Iglesia de Inglaterra, que asiste a la vigilia.
(Justin Welby, Arzobispo de Canterbury)
“Cuando nadamos contra la corriente, con el perdón, buscando construir algo en lugar de destruir, podemos cambiar a otras personas. Él captó esa visión y es un hombre extraordinario”.
Magen Inon dice que el conflicto de Medio Oriente sólo puede resolverse si las personas ven la humanidad de los demás.
