Costa Rica pretende declarar estado de emergencia debido a una creciente ola de migrantes que se dirigen a Estados Unidos a través del país centroamericano.
“He ordenado al Ministerio de Seguridad que adopte una postura firme con cualquiera que tome la bondad de Costa Rica como debilidad”, dijo el presidente costarricense Rodrigo Chaves en una conferencia de prensa, refiriéndose a los recientes disturbios de migrantes que cruzan el país.
¿Cuántos migrantes hay en Costa Rica?
Desde enero, más de 386.000 migrantes han cruzado la frontera de Panamá hacia Costa Rica.
Las autoridades dicen que en lo que va de septiembre, más de 60.000 personas han cruzado Paso Canoas, la ciudad fronteriza de Costa Rica compartida con Panamá que alberga a menos de 20.000 personas.
“Todos sabemos que en toda América hay una crisis migratoria”, dijo el presidente.
Chávez tiene previsto visitar Panamá en octubre para discutir el tema.
Además de Centroamérica, un número cada vez mayor de personas también está llegando desde Venezuela, Haití y Cuba, así como desde África y Asia, en un intento por huir de la pobreza, la violencia y las crisis políticas en sus países de origen.
México ha endurecido los controles para impedir que los migrantes aborden trenes de carga como polizones.
‘Una región en estado de crisis’
El lunes, el comisionado de derechos humanos de Alemania expresó su preocupación por la situación en Centroamérica luego de un viaje a la región.
“Estamos ante una región en crisis”, afirmó Luise Amtsberg al finalizar su viaje a Costa Rica.
Se reunió con activistas de derechos humanos de Nicaragua y El Salvador, donde el presidente populista de derecha Nayib está tomando medidas drásticas contra las bandas juveniles criminales.
“En El Salvador, las estructuras democráticas están siendo desmanteladas sistemáticamente, el estado de emergencia está en vigor desde hace 16 meses y casi el 2% de la población está en prisión; nadie que se pronuncie en contra puede estar seguro de que pronto no se enfrentará a la misma suerte”, afirmó Amtsberg.
Mientras tanto, en Nicaragua, Daniel Ortega, el autoritario jefe de Estado, está tomando medidas extremas para reprimir a sus opositores.
“En Nicaragua, la gente es exiliada, se les quitan sus posesiones y pensiones, su existencia prácticamente se borra. Todos los lugares de pensamiento crítico están siendo gradualmente víctimas de esta política autoritaria”, añadió Amtsberg.
Muchos refugiados políticos están encontrando refugio en Costa Rica.
“Pero Costa Rica está llegando a su punto de quiebre; estamos claramente en un punto de quiebre”, dijo Amtsberg. “Todavía hay espacio y protección, pero recientemente también ha habido un debate sobre una política de asilo más restrictiva”.
dvv/fb (dpa, Reuters)