Un ex ministro paquistaní y colaborador cercano del ex primer ministro Imran Khan lanzó una lucha legal contra Islamabad después de que un ataque con ácido lo dejara “marcado de por vida” en el Reino Unido. El ataque con ácido tuvo lugar en noviembre del año pasado cuando Shahzad Akbar abrió la puerta a una persona que llamó a su casa en la ciudad inglesa de Royston. Tuvo la suerte de no perder la vista, algo que se debe a llevar gafas y cerrar la puerta a tiempo. Akbar ha buscado refugio en Gran Bretaña después de liderar los esfuerzos para apuntalar a su exjefe en casa, quien fue derrocado del poder hace dos años.
Shahzad Akbar alega que la agencia de inteligencia de Pakistán, ISI, estuvo detrás del ataque con ácido.
Lo llevaron de urgencia al hospital y lo trataron por quemaduras en la cabeza y un brazo. La agencia de noticias The Independent lo citó diciendo: “Las heridas físicas han sanado. Los psicológicos son más profundos”.
“Estaban tratando de enviarme un mensaje: que no estoy a salvo. Esta vez no intentaban matarme, pero dejaron claro que podían hacerlo”, añadió.
“En diciembre de 2022, Shahzad se instaló en el Reino Unido y asumió un puesto de abogado interno en una empresa del Reino Unido con sede en Londres. Afirma que el gobierno de Pakistán ha seguido apuntándolo mediante actos de represión transnacional”, añade.
Antes del ataque, en octubre de 2023, el exministro también afirmó que la Alta Comisión de Pakistán en Londres estaba siguiendo sus movimientos y rastreando la dirección de su casa.
Pakistán es conocido por atacar a elementos antisistema en el extranjero. Según Akbar, varios activistas han sido atacados por el gobierno paquistaní, entre ellos Ahmad Waqas Goraya, Gul Bukhari, Fazal Khan y Arshad Sharif.