Turbulencia en los cielos: vuelos de Vistara retrasados ​​y cancelados en medio de crisis de pilotos

En los últimos dos días, los pasajeros que viajaban a través del Aeropuerto Internacional Kempegowda (KIA) en Bengaluru, India, se enfrentaron a grandes retrasos y cancelaciones, con alrededor de 20 vuelos de Vistara interrumpidos.

Según los informes, estas interrupciones, que afectan a los vuelos tanto de entrada como de salida, han provocado varios retrasos para los viajeros, que duraron seis horas o más.

Hay indicios de que estas interrupciones están relacionadas con una huelga en curso de los pilotos de Vistara.

Un informe de la agencia de noticias TNN citó a un pasajero frustrado, que compartió su terrible experiencia en las redes sociales, quien dijo que estuvo esperando desde las 6 de la tarde del lunes su vuelo, que finalmente partió a las 8:25 del día siguiente, después de un gran retraso de más de 14 horas.

Los informes sugieren que incluso se obligó a los pasajeros a bajar del avión durante la noche, sólo para volver a facturar más tarde.

Otros viajeros se quejaron de la falta de personal de comunicación y asistencia durante la crisis, dejándolos varados en el aeropuerto sin información adecuada.

En respuesta a la situación, la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) ha ordenado a Vistara que proporcione informes diarios que detallen las interrupciones de los vuelos.

La aerolínea ha recibido instrucciones de garantizar que los pasajeros afectados reciban las facilidades necesarias, como información anticipada, opciones de reembolso y compensación.

Un portavoz de Vistara atribuyó las interrupciones a varios factores, incluida la falta de disponibilidad de la tripulación de vuelo.

Para abordar el problema, Vistara ha iniciado medidas como reducir temporalmente las operaciones de vuelo y desplegar aviones más grandes para optimizar la capacidad y mantener la conectividad en toda su red.

Las interrupciones en los vuelos se producen mientras Vistara enfrenta otros desafíos importantes, con informes que dicen que alrededor de 15 primeros oficiales superiores han renunciado a la aerolínea, lo que ha provocado una escasez de pilotos.

Estas renuncias se deben al descontento entre los pilotos, particularmente por los cambios propuestos a las estructuras salariales y los incentivos.

Las fuentes revelan que los pilotos que dimitieron habían recibido formación para operar aviones Boeing 787 de fuselaje ancho, pero no se les asignaron tareas de vuelo para estos aviones.

La aerolínea, que opera más de 300 vuelos diarios, atraviesa actualmente un período desafiante marcado tanto por la escasez de tripulación como por el descontento interno.