Cientos de manifestantes violentos irrumpieron y saquearon la residencia oficial de la Primera Ministra Sheikh Hasina mientras la líder huía a la India con la esperanza de asilo el lunes (5 de agosto).
Los manifestantes, desafiando el toque de queda militar impuesto en la capital, entraron al Palacio Gono Bhaban y destrozaron muebles, paneles de vidrio de las puertas, libros y otros objetos y expresaron su enojo por las cuotas de empleos en el servicio civil anunciadas recientemente por el gobierno.
Bangladesh vivió imágenes similares a lo ocurrido en su país vecino, Sri Lanka, después de que su líder, Gotabaya Rajapaksa, huyera del país y los manifestantes invadieran el palacio presidencial para saquear cualquier objeto valioso que se encontrara en la casa más poderosa del país.
Los estudiantes protestaban contra las cuotas de empleo en el sector público, en las que se reservaba el 30 por ciento a los familiares de los combatientes de la Guerra de Independencia de Pakistán de 1971.
El lunes (5 de agosto), miles de manifestantes marcharon hacia la capital y exigieron la dimisión de Hasina. La marcha se llevó a cabo después de que más de 100 personas murieran en enfrentamientos entre partidarios del gobierno y grupos pro gubernamentales el domingo (4 de agosto).
Cuando Hasina huyó del país, multitudes jubilosas salieron a las calles de Bangladesh y celebraron su caída del poder.
