Artículo de opinión: Lo que esperamos del próximo comisionado de salud

Artículo de opinión: Lo que esperamos del próximo comisionado de salud

Cuando la comisaria de Salud elegida por Ursula von der Leyen hable ante el Parlamento, esto es lo que querremos saber.
El ex comisario europeo Vytenis Andriukaitis habla con los periodistas sobre el informe Panorama de la salud.

Los días comprendidos entre el 4 y el 12 de noviembre serán intensos para el Parlamento Europeo. Los eurodiputados tienen la tarea de examinar a los candidatos para la nueva Comisión. Nosotros, en la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria (ENVI), nos reuniremos con seis de ellos.

El que más me interesa es el candidato para salud y bienestar animal: Olivér Várhelyi, de Hungría. Esto se debe a mi formación como médico y a haber ocupado este puesto anteriormente, en la Comisión Juncker entre 2014 y 2019.

Mi primera tarea es comprender el enfoque de Várhelyi respecto de los objetivos específicos establecidos en la carta de misión del Presidente de la Comisión. Se trata de una lista ambiciosa que demuestra continuidad, como completar la Unión Europea de la Salud, implementar el Plan Europeo de Lucha contra el Cáncer y hacer más para abordar la resistencia a los antimicrobianos, una amenaza existencial para nuestros sistemas de salud. También hay nuevos desafíos, como el impacto de las redes sociales en el bienestar. También existe el riesgo de lo desconocido, como nos enseñó la pandemia.

Todas estas cuestiones serán desafiantes e implicarán compensaciones. Nosotros, en la comunidad de la salud, sabemos muy bien lo difícil que puede ser defender la salud, especialmente cuando nos enfrentamos a intereses poderosos. La creciente literatura sobre los determinantes comerciales de la salud ha demostrado cómo quienes se benefician del alcohol, la comida chatarra y los juegos de azar utilizan las mismas tácticas empleadas durante mucho tiempo por la industria tabacalera.

El Comisario propuesto debe convencernos de que puede defender la salud, defendiendo esos intereses cuando sea necesario.

Como deja claro la Carta de la Misión, vivimos en un mundo peligroso y turbulento. La invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia está muy presente en nuestras mentes. Como lituano que nació en el gulag y encarcelado por las autoridades soviéticas, esta amenaza particular es personal.

Pero no es la única amenaza. Los fenómenos meteorológicos extremos que hemos experimentado recientemente han dejado claro las trágicas consecuencias del cambio climático. Me preocupa especialmente que no hayamos aplicado las lecciones aprendidas durante la pandemia.

Estoy encantado de que One Health, que reúne la salud de los seres humanos, los animales y el medio ambiente, ocupe un lugar destacado en la Carta de la Misión. Necesitamos ver cómo el Comisario propuesto cumplirá esa promesa. Requiere una estrecha colaboración entre la Comisión y sus agencias, así como entre los Estados miembros y la comunidad internacional. Será un desafío formidable.

Hace veinte años, la UE adoptó el concepto de que “la salud es riqueza”. Nos enfrentamos a una crisis demográfica, con una caída de las tasas de natalidad y un envejecimiento de la población. Necesitamos desesperadamente mantener a las personas en la fuerza laboral por más tiempo, y sabemos que la mala salud es una de las principales razones por las que la abandonan prematuramente.

También sabemos que las personas más sanas son más productivas y, especialmente entre los jóvenes, quienes gozan de mejor salud invierten más en su propia educación. Me decepcionó que esta cuestión no estuviera incluida en el informe sobre competitividad de Mario Draghi y espero que el Comisario propuesto subsane esa omisión.

La propia democracia tiene vínculos con la salud. Una nueva investigación muestra cómo quienes se quedan atrás, en lugares que experimentan altos niveles de “muertes por desesperación”, se alejan de la política dominante. Para ellos, el contrato social está roto. Las políticas que mejoren la salud de quienes se sienten abandonados serán esenciales si queremos lograr un resurgimiento democrático.

Un último punto sobre el que me gustaría escuchar la opinión de Várhelyi es el bienestar animal, que es la otra parte de su cartera de salud. Su carta de misión le instruye a modernizar las reglas en esta área, abordando la sostenibilidad así como consideraciones éticas, científicas y económicas. Este nuevo rol ofrece la oportunidad de trabajar entre especies, utilizando el enfoque Una Salud, para lograr otra de las tareas que se le ha encomendado: reducir la resistencia a los antimicrobianos, que es una amenaza existencial reconocida para la humanidad.

La cartera de salud suele ocupar un lugar bajo en la jerarquía política. Pero cuando nos detenemos a pensar en ellos, podemos ver que nada podría estar más lejos de la verdad. El próximo comisario tiene una tarea difícil e importante que asumir.

Nuestra tarea, como miembros del Parlamento Europeo, es asegurarnos de que sea la persona adecuada para el puesto adecuado.