Fani Willis, que representa a la fiscalía en el caso de interferencia electoral del expresidente estadounidense Donald Trump en Georgia, admitió tener una relación con un fiscal especial que contrató para trabajar en el caso.
Sin embargo, en su presentación judicial presentada el viernes, también argumentó que su “relación personal” con el fiscal especial Nathan Wade no constituye ninguna base para su expulsión del caso.
Citando la relación de Willis y Wade, Trump y otros coacusados han tratado de descalificarla y desestimar los cargos.
Willis ha calificado de “infundada” la solicitud de Trump para su despido e instó al juez del Tribunal Superior del condado de Fulton, Scott McAfee, a rechazarla.
Ella, en su presentación ante la corte, dijo que no había ninguna relación en el momento en que Wade fue contratado como fiscal especial en noviembre de 2021.
En una declaración jurada adjunta, Wade dijo que su relación comenzó en 2022 y que ella “no ha recibido fondos ni ganancias financieras personales de mi puesto como Fiscal Especial”.
¿Cuál es el caso contra Donald Trump?
Trump se enfrenta a una demanda que alega su interferencia en el resultado de las elecciones de 2020 en Georgia, donde el demócrata Joe Biden ganó por aproximadamente 12.000 votos.
La acusación de Trump enumera una llamada telefónica entre él y su colega republicano, el secretario de Estado Brad Raffensperger, en la que Trump le pide a Raffensperger que le ayude a “encontrar” los 11.780 votos necesarios para revertir su derrota electoral ante Biden.
Wade, quien fue contratado para ayudar a Willis en su investigación contra Trump, ha dirigido la acusación desde la acusación de Trump en agosto.
mfi/sri (AP, AFP)