Más de 100 delfines fueron encontrados muertos en un afluente del río Amazonas en Brasil la semana pasada. Los expertos sospechan que las muertes pueden haber sido causadas por una grave sequía y un aumento del calor.
Al menos 70 de los restos fueron encontrados flotando el jueves cuando la temperatura del agua del lago Tefe alcanzó los 39 grados Celsius (102 grados Fahrenheit), más de 10 grados más que el promedio habitual para esta época del año.
El calentamiento del agua es una preocupación
Los expertos creen que los bajos niveles de los ríos durante una grave sequía han calentado el agua en tramos a temperaturas que son intolerables para los delfines.
Después de unos días de descenso, la temperatura del agua volvió a subir el domingo a 37 grados centígrados.
La región alrededor del lago es un hábitat clave para mamíferos y otras especies acuáticas. Según los medios locales, también han muerto grandes cantidades de peces.
Los científicos están trabajando para descartar otras causas, como infecciones bacterianas, ya que no saben con certeza que la sequía y el calor sean los culpables del aumento de la mortalidad de los delfines.
“Tenemos unos 900 delfines de río y 500 tucuxis (en el lago de Tefé) y en una semana ya hemos perdido entre los dos unos 120 animales, lo que podría representar entre el 5% y el 10% de la población”, afirma Miriam Marmontel, una dijo el investigador del instituto ambiental Mamiraua.
Especies amenazadas
Los delfines del río Amazonas, algunos de color rosado, son una especie de agua dulce única que se encuentra únicamente en los ríos de América del Sur.
Un ciclo reproductivo lento hace que sus poblaciones sean especialmente propensas a sufrir amenazas.
Los delfines de agua dulce, o “Tucuxis”, están en la lista roja de especies amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
“Diez por ciento es un porcentaje muy alto de pérdida, y la posibilidad de que aumente podría amenazar la supervivencia de la especie en el lago Tefé”, advirtió Marmontel.
El lunes, los investigadores todavía estaban recuperando delfines muertos en la región donde los ríos secos también han impactado a las comunidades ribereñas empobrecidas, encallando sus barcos en la arena.
dvv/kb (AP, Reuters)