El gobierno de coalición de España bajo el primer ministro Pedro Sánchez ha sufrido un revés después de que la cámara baja del parlamento no logró aprobar una controvertida ley destinada a conceder amnistía a los separatistas catalanes.
La ley enormemente divisiva, presentada por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Sánchez, fue una condición para el apoyo de los separatistas catalanes de línea dura a la coalición de gobierno del primer ministro, que depende de un mosaico de partidos para aprobar leyes.
La ley propuesta habría bloqueado acciones legales contra cientos de activistas catalanes investigados o enfrentados a juicio por su papel en el intento de declaración de un estado catalán independiente en 2017, siendo en primer lugar el líder separatista exiliado Carles Puigdemont.
El proyecto de ley volverá ahora a ser debatido en una comisión parlamentaria y eventualmente podría ser enviado de nuevo para una nueva votación en la cámara baja.
¿Qué hace que el proyecto de ley sea tan controvertido?
La ley contó con el apoyo del partido de extrema izquierda Sumar, así como de los partidos regionales vascos.
Sin embargo, fue el propio partido de Puigdemont, Junts per Catalunya (JxCat), “Juntos por Cataluña”, el que retiró su apoyo al proyecto de ley.
El partido separatista dijo que el proyecto de ley no garantizaba que se eliminarían todas las excepciones relacionadas con el terrorismo. Algunos de los políticos del partido están siendo investigados por los tribunales por presuntos delitos relacionados con el terrorismo.
“Este texto es un buen punto de partida… pero tiene agujeros que el prejuicioso sistema judicial español puede utilizar para dejar la amnistía hecha jirones”, dijo al Parlamento la diputada de JxCat Miriam Nogueras.
Sánchez ha dicho que sin el apoyo de los catalanes no podría haber formado un gobierno y que los populistas de derecha podrían haber llegado al poder después de obtener la mayor cantidad de escaños en las elecciones de 2023.
Pero la ley podría haber allanado el camino para el regreso de Puigdemont, quien huyó a Bélgica después de liderar el fallido intento de secesión ilegal que llevó al país al borde del abismo.
Decenas de miles de personas protestaron en Madrid el domingo, pidiendo al gobierno que rechace la aprobación de la legislación.
Puigdemont y la cuestión de la independencia catalana son impopulares para muchos españoles, y el proyecto de ley de amnistía ha enfurecido a los partidos de oposición conservadores y de extrema derecha que representan aproximadamente la mitad de la población del país.
En declaraciones ante 45.000 manifestantes en el centro de Madrid el fin de semana, Alberto Núñez Feijoo, del opositor Partido Popular (PP), de derecha, acusó a Sánchez de ofrecer inmunidad a los separatistas que verían la división de España a cambio del poder, lo que Feijoo calificó como la “peor versión”. de poder.”
señor/wmr (Reuters, AFP)