En una medida importante para reducir los gastos gubernamentales, el Primer Ministro de Pakistán, Shehbaz Sharif, ha implementado una prohibición sobre el uso de alfombras rojas en eventos gubernamentales, reservándolas exclusivamente para recepciones diplomáticas, según informó ANI.
Esta medida es parte de una iniciativa más amplia para reducir la tensión financiera en el país económicamente paralizado.
El Primer Ministro Sharif expresó su descontento por el uso generalizado de alfombras rojas durante las visitas de ministros federales y altos funcionarios a funciones gubernamentales.
Por ello, la División del Gabinete ha anunciado una directiva, de acuerdo con los deseos del Primer Ministro, que prohíbe estrictamente el despliegue de alfombras rojas en los eventos oficiales.
Según la notificación emitida por la División del Gabinete, el Primer Ministro ha ordenado explícitamente que las alfombras rojas ya no adornen los caminos de los ministros federales y dignatarios del gobierno durante las reuniones oficiales.
Sin embargo, seguirán estando permitidos únicamente con fines diplomáticos.
Más allá de sus connotaciones simbólicas, la decisión de prohibir las alfombras rojas es el esfuerzo de Pakistán por reducir gastos innecesarios y redirigir recursos financieros hacia áreas urgentes de gobernanza.
Lea también | Pakistán volverá a subir los precios del petróleo. Esto es lo que costará ahora.
Decisión de renunciar a salarios y ventajas
Esta medida sigue a las decisiones recientes del Primer Ministro Sharif y miembros del Gabinete de renunciar voluntariamente a sus salarios y beneficios. Sharif ha dicho repetidamente que la austeridad es la preocupación más importante de su administración, especialmente a la luz de la terrible situación económica de Pakistán.
En un acontecimiento reciente, el Primer Ministro Sharif anunció planes de acercarse al Fondo Monetario Internacional (FMI) para otro programa. Esta decisión se produce poco después de que el país alcanzara un acuerdo a nivel de personal con el FMI sobre el desembolso del tramo final de 1.100 millones de dólares.