El economista libertario Javier Milei, de 53 años, juró el domingo como presidente de Argentina.
Ha prometido que no habrá “medidas a medias” mientras enfrenta décadas de gasto excesivo, deuda y complicados controles cambiarios en la tercera economía más grande de América Latina.
“Juro por Dios y la patria… desempeñar con lealtad y patriotismo el cargo de presidente de la nación argentina”, dijo al prestar juramento.
Mientras tanto, miles de sus seguidores se alinearon en las calles frente al Congreso en Buenos Aires, ondeando la bandera azul y blanca del país y coreando el grito de guerra de Milei: “¡Libertad!”
“No hay alternativa al tratamiento de shock”
Tras la ceremonia de juramentación, Milei prometió una nueva era para el país, pero advirtió sobre dolorosas medidas de austeridad y una crisis económica que “empeorará” antes de mejorar.
“Hoy comienza una nueva era en la Argentina”, afirmó, destacando que “ningún gobierno ha recibido una herencia peor que la que estamos recibiendo”.
“La conclusión es que no hay alternativa a la austeridad y no hay alternativa al tratamiento de shock”, advirtió Milei, diciendo que sus predecesores habían dejado al país sin fondos y en el camino hacia la hiperinflación.
Milei enfrenta enormes desafíos
La inflación en Argentina ha alcanzado el 140% interanual y el 40% de la población vive en la pobreza. Los analistas han advertido que las reservas de divisas están profundamente agotadas y que el país fuertemente endeudado tiene pocas opciones para endeudarse.
Milei ha dicho que planea reestructurar radicalmente el país, que se encuentra en medio de una grave crisis económica. Durante la campaña electoral, Milei advirtió sobre recortes de gasto equivalentes al 5% del producto interno bruto argentino.
Incluso dijo que aboliría el banco central y adoptaría el dólar como moneda nacional debido a la inflación extremadamente alta.
Invitados de todo el mundo
Entre los invitados a la ceremonia se encontraban el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy y el primer ministro húngaro, Viktor Orban.
Milei habló brevemente con Zelenskyy en las escaleras del Congreso y los dos hombres compartieron un cálido abrazo. El líder ucraniano dijo en las redes sociales que también había mantenido conversaciones con los líderes de Ecuador, Paraguay y Uruguay mientras buscaba reforzar el apoyo a una Ucrania devastada por la guerra.
También estuvo presente el expresidente de derecha de Brasil, Jair Bolsonaro, y el presidente de izquierda de Chile, Gabriel Boric. Sin embargo, los izquierdistas Luiz Inácio Lula da Silva, el actual líder brasileño, y el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, fueron algunas de las ausencias más importantes.
dh/nm (AFP, AP, Reuters)