El Papa Francisco inauguró el sábado la primera visita papal a Mongolia, hogar de unos 1.450 católicos.
Hablando ante obispos, sacerdotes y trabajadores pastorales, el Papa dijo que Jesús no dio ningún mandato político a sus apóstoles, pero les dijo que aliviaran los sufrimientos de una “humanidad herida” a través de la fe, en un aparente mensaje a Beijing.
“Por esta razón, los gobiernos y las instituciones seculares no tienen nada que temer de la obra evangelizadora de la Iglesia”, afirmó Francisco en la nación asiática situada entre China y Rusia.
La Iglesia “no tiene una agenda política que avanzar, sino que está sostenida por el poder silencioso de la gracia de Dios y un mensaje de misericordia y verdad, que está destinado a promover el bien de todos”, añadió.
Según informes de los medios, los católicos chinos estaban acudiendo en masa a la capital de Mongolia, Ulán Bator, para ver al Papa.
A la llegada de Francisco el viernes, Beijing dijo que esperaba “fortalecer la confianza mutua” con el Vaticano después de que el Papa enviara un mensaje de saludo al presidente Xi Jinping.
El Papa elogia la libertad religiosa de Mongolia
El Papa, de 86 años, fue recibido en una ceremonia oficial por el presidente de Mongolia, Ukhnaa Khurelsukh, con una falange de jinetes mongoles con armaduras metálicas desfilando frente al Palacio de Estado.
Francisco elogió la tradición de libertad religiosa de Mongolia que se remonta a la época de su fundador, Genghis Khan.
“El hecho de que el imperio haya podido abarcar tierras tan lejanas y variadas a lo largo de los siglos es testimonio de la notable capacidad de vuestros antepasados para reconocer las cualidades excepcionales de los pueblos presentes en su inmenso territorio y ponerlas al servicio de un desarrollo común. “, dijo Francisco en la ceremonia.
“Este modelo debería valorarse y proponerse nuevamente en nuestros días”, añadió.
Francisco pidió fraternidad y paz como las hubo en el período de relativa estabilidad política del siglo XIII dentro del Imperio mongol.
“Que el cielo conceda que hoy, en esta tierra devastada por innumerables conflictos, se renueve, respetando las leyes internacionales, la condición de lo que una vez fue la pax mongolica, es decir, la ausencia de conflictos”, dijo.
fb/lo (AFP, AP, Reuters)