Moscú planea aportar su experiencia en “energía espacial nuclear” a un programa lunar conjunto con China, incluida una planta de energía nuclear en la luna, dijo el lunes el jefe de la agencia espacial rusa, Yuri Borisov.
Borisov advirtió que los paneles solares no serían suficientes para garantizar un suministro fiable de electricidad a posibles asentamientos lunares.
“Hoy estamos considerando seriamente un proyecto, en algún momento entre 2033 y 2035, para entregar e instalar una unidad de energía en la superficie lunar junto con nuestros colegas chinos”, dijo Borisov durante un evento juvenil.
Algunos en Estados Unidos han especulado que Rusia planea utilizar un nuevo tipo de arma nuclear contra satélites. Pero el jefe de Roskosmos, que asumió el mando de Roskosmos en 2022, insistió en que Rusia no tenía planes de colocar armas nucleares en el espacio.
Una planta nuclear en la Luna necesitaría ser construida con máquinas, añadió Borisov, afirmando que ya existen soluciones técnicas utilizables para el proyecto.
Cooperación espacial entre Rusia y China
En marzo de 2021, Moscú y Beijing firmaron un acuerdo para la construcción de una estación internacional de investigación lunar y presentaron una hoja de ruta para su construcción en junio de 2021.
China tiene su propio programa de exploración lunar, y en mayo se lanzará una sonda no tripulada “Chang'e-6” para recolectar muestras de rocas.
Mientras tanto, el programa espacial ruso ha sufrido una serie de reveses en los últimos años. Su primera misión lunar en 47 años fracasó el año pasado después de que la nave espacial rusa Luna-25 se saliera de control y se estrellara.
¿Carrera para llevar energía nuclear a la Luna?
La agencia espacial estadounidense, NASA, también ha planteado el concepto de utilizar reactores nucleares para alimentar futuras colonias lunares. Apenas unos meses después de que la misión Apolo 11 llevara humanos a la luna en 1969, los astronautas del Apolo 12 utilizaron un generador nuclear para proporcionar electricidad para experimentos científicos en la superficie lunar.
Dado que las noches lunares duran 14 días terrestres, depender únicamente de la energía solar conlleva riesgos para las misiones lunares tanto tripuladas como no tripuladas. Pero la cuestión del suministro de energía en el espacio se está volviendo aún más esencial a medida que la NASA persigue planes para devolver personas a la Luna dentro de su misión Artemis, cuyo primer aterrizaje está programado ahora para 2026.
En 2022, la NASA anunció que estaba cooperando con el Departamento de Energía de EE. UU. para seleccionar “propuestas conceptuales” para un sistema de energía nuclear “que podría estar listo para su lanzamiento a finales de la década”.
dh/dj (dpa, Reuters, Interfax)