Un tribunal de apelaciones de Estados Unidos dictaminó el martes que el expresidente Donald Trump puede enfrentar un juicio acusado de conspirar para anular los resultados de las elecciones presidenciales de 2020.
La decisión rechaza la afirmación de Trump de que, como expresidente, no puede enfrentar cargos penales por conducta relacionada con responsabilidades oficiales durante su presidencia.
Trump está acusado de intentar subvertir los resultados de las elecciones presidenciales estadounidenses de 2020 mientras estaba en la Casa Blanca en el período previo al 6 de enero, cuando una turba de sus partidarios irrumpió en el Capitolio de Estados Unidos mientras los legisladores certificaban la victoria de Joe Biden.
Trump y su equipo han argumentado que actuaba a título oficial mientras buscaba anular los resultados de las elecciones presidenciales de 2020.
¿Qué dijo el tribunal?
La Corte de Apelaciones de Estados Unidos para el Circuito del Distrito de Columbia dijo el martes que el reclamo de inmunidad de Trump “no estaba respaldado por precedentes, historia o el texto y la estructura de la Constitución”.
El panel escribió que el “interés en la responsabilidad penal” que tiene el Poder Ejecutivo del gobierno estadounidense “supera los riesgos potenciales” de que dicha responsabilidad obstaculice la acción presidencial y “permita litigios vejatorios”.
“A los efectos de este caso penal, el expresidente Trump se ha convertido en ciudadano Trump, con todas las defensas de cualquier otro acusado penal”, escribió el panel.
Sin embargo, la decisión del martes no es el golpe final para Trump, ya que se espera que siga apelando sus reclamaciones de inmunidad ejecutiva ante la Corte Suprema de Estados Unidos.
En diciembre, la Corte Suprema se negó a pronunciarse sobre los reclamos de inmunidad de Trump y remitió el asunto al tribunal inferior de apelaciones.
Todos los ojos puestos en la fecha del juicio
El momento en que Trump será juzgado por el caso de interferencia electoral tiene enormes ramificaciones políticas.
Trump es el favorito republicano para las elecciones presidenciales estadounidenses de 2024, y el prolongado proceso de apelación podría retrasar la fecha del juicio más allá del día de las elecciones en noviembre.
Si Trump gana la presidencia, podría utilizar su posición para ordenar a un nuevo fiscal general que desestime los casos federales o intente indultarse a sí mismo.
El juicio estaba originalmente programado para marzo, pero se pospuso la semana pasada debido al proceso de apelación y el juez no fijó de inmediato una nueva fecha.
Trump también enfrenta otros tres procesos penales. En Florida se le acusa de retención ilegal de documentos clasificados en esta finca de Mar-a-lago. En Georgia, Trump está acusado de conspirar para subvertir las elecciones de 2020 en el estado.
Y en Nueva York se enfrenta a cargos relacionados con pagos para mantener su silencio a una actriz porno. También está siendo demandado por fraude en un caso civil de Nueva York.
wmr/msh (AFP, AP, Reuters)